Se desprende de la llamada slow life, una filosof�a donde se valora m�s la calidad que la cantidad, entre los espacios que se dedica a tener sexo
El slow sex se desprende de la llamada slow life, una filosofía donde se valora más la calidad que la cantidad, sobre todo en un mundo regido por la rapidez en todos los ámbitos en los que se desenvuelven las personas.
El slow sex se desprende de la llamada slow life, una filosofía donde se valora más la calidad que la cantidad, sobre todo en un mundo regido por la rapidez en todos los ámbitos en los que se desenvuelven las personas.
Esta idea invita a no contar los minutos, pero sí a disfrutarlos. Tener una vida apacible, desacelerada. Saborear la vida sorbo a sorbo, con el fin de que sea más humana.
Larry Dossey, un médico estadounidense dice que se vive en una sociedad que rinde culto a la velocidad, "mientras más rápido mejor, pero al final sólo queda angustia, estrés, mal humor que a su vez, se proyecta en familia, trabajo, amor y en cada uno".
El sexo tántrico va muy de la mano con la filosofía del slow sex, es una mezcla de orientalismo en la cama, que permite el goce de todas las partes del cuerpo, alargando el éxtasis, ya de10.com.mx planteó pasos para este tipo de sexo.
El sexo lento llega entonces como una respuesta al fast sex o fast dating, donde las relaciones tanto amorosas como sexuales se dan de una forma instantánea, a causa de la imposición de la vida moderna. El objetivo es llevarse a la cama a alguien para pasar una próxima conquista. Así lo mencionó Alberto Vitale el fundador italiano del slow sex.
Para que todo esto sea más sencillo, hay técnicas para el sexo lento heredadas del budismo y del Tantra. Algunos practican lo que llaman Meditación Orgásmica, con orgasmos incluidos. Cabe destacar que el sexo lento no es necesariamente que se muevan en cámara lenta, sino que se decida si después de una rutina ajetreada, se desea seguir en ese ritmo en la intimidad o crear un tiempo y un espacio para el buen sexo.
"Todo sexo se hace a gusto de cada persona, así como hay quien lo disfruta lento, hay a quien le gusta rápido, con o sin amor; dudo que se dé un movimiento fuerte con el slow sex, pues por lo menos en México se vive muy aceleradamente. No a todos les gustan los detalles o ser detallistas, ni están dispuestos a esperar por una buena sesión de sexo, es decir, no a todos se les da" comenta el sexólogo César Pérez del Imesex.
Una de las consecuencias de la vida acelerada, que menciona el sitio elforro.com en su sección de sexualidad, es que se aumentan males como el estrés o el síndrome de la felicidad aplazada. Consiste en sufrir ataques de pánico cuando no se pueden llevar a cabo las obligaciones. Lo padecen los que dejan para más tarde las experiencias gratificantes, las cuales nunca llegan.
Es importante destacar que el hecho de relacionar el slow sex con el tantra no significa que sea algo aburrido, al contrario, es darle peso a la calidad, ya que debido a la saturación informativa sobre sexo parece que el mundo tiene relaciones todo el tiempo, cuando la verdad es que se dedica poco a practicarlo y la forma más expandida es "aquí te agarro, aquí te mato".
Por otro lado, el sexo rutinario termina con las relaciones, de hecho, se le da mucho peso a un orgasmo, cuando en el slow sex, puede no existir, no es lo primordial. Hay que olvidarse de cuántas veces, con cuántas mujeres u hombres, la cantidad de posturas o cuántos orgasmos han alcanzado o pueden alcanzar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario