Siempre nos han dicho lo importante que es la postura corporal para mantener nuestra espalda sana. Sentarnos correctamente, caminar correctamente y hasta formas de dormir correctamente. Pero hasta el momento todo se trataba de la salud de nuestros huesos y músculos.
Recientemente, un grupo de científicos de la Universidad de Indiana descubrieron una impresionante relación entre la postura corporal, la adquisición de conocimientos y el desarrollo de la memoria a largo plazo. Vamos a ver de qué se trata más en detalle.
La posición del cuerpo está relacionada al modo en que percibimos los objetos y adquirimos conocimiento
El estudio a cargo de Linda Smith se basó en cómo adquieren conocimientos y habilidades nuevas los niños durante la primera infancia. Según Smith «Los pensamientos, palabras y representaciones de objetos primero toman forma a través de la relación espacial del cuerpo en el mundo que nos rodea».
Los investigadores desarrollaron un robot capaz de emular, con cierto margen de error, la forma en que los infantes asimilan el conocimiento de nuevas palabras y objetos del mundo que los rodea. Comparando el desempeño del robot y el de los niños, los científicos observaron que la relación espacial respecto al objeto era crucial para determinar cuán rápido o cuán fácilmente se identifica y nombra un objeto.
La muestra de niños para este estudio reunió bebes entre 12 y 18 meses de edad, que fueron sometidos a sencillos experimentos de identificación de objetos. La comparación con el robot mostró claras diferencias, lo cual resulta bastante lógico, ya que se trata de sujetos diferentes (si es que un robot puede ser considerado un sujeto).
Mas los científicos señalan que la comparación es válida, ya que el robot estaba programado de tal forma que se comporte de forma similar a un niño de tal edad. La discusión, entonces, se trata de cuánto se conoce verdaderamente sobre el funcionamiento cerebral o cognitivo de los niños a esa edad.
En cualquier caso hace falta mucha investigación, mas resulta interesante comenzar a pensar en la posibilidad, por cierto muy lógica, de que la postura corporal y las habilidades motrices y motoras están relacionadas con la eficiencia con la que conocemos el mundo que nos rodea.
Sería interesante, además, conocer qué sucede con los adultos, cómo conocemos, cómo apreciamos la realidad y el espacio que nos rodea. Esta es solo una idea inicial que a mi me parece bastante innovadora pero, vamos, que la acumulación en este campo de estudio aún no constituye un cuerpo teórico de relevancia.
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